Uno de los grandes placeres que podemos experimentar, y que además está pasando por una etapa de oro en cuanto a tendencia se refiere, es el del comer y el beber. En el sentido más experiencial, la gastronomía puede ser una gran fuente de inspiración, desconexión y relax. En este caso optamos por viajar a través de sabores, texturas, olores y sensaciones, concentrándonos solo en el momento de la ingesta, y a su vez, aprendiendo más acerca de los alimentos y las bebidas que nos rodean. Aprovechando el apetito que puede surgir durante el circuito WellBeen, introducimos la experiencia gastronómica como una de las partes per se.